Esperar la respuesta

La propuesta le quemaba en las manos…

¿Te apetece que nos veamos esta tarde? Así, sin miramientos, y antes de arrepentirse, lanzó el mensaje…Ya no había vuelta atrás…Para no acobardarse…

Y ahora solo quedó esperar una respuesta. Confiaba que fuera la que esperaba…pero nunca se sabía.

Aún así, fuera sí o no, estaba claro que había demostrado lo que sentía, ¿no? que era lo que contaba…

Le había hecho caso al corazón, como siempre le decían quienes la conocían…Necesitaba demostrar que no era un corazón helado, que no era una persona fría…Por eso pensaba que merecía algo bueno a cambio, y ojalá, por tanto, la respuesta fuera aquella que deseaba…

img_4573
Ilustración de Mr Wonderful