Hoy me ilusionaré contigo…
Mañana te entregaré toda mi confianza…
Pasado me romperás el corazón…
Y al siguiente me veré intentando olvidarte…
Como ya hice contigo. Como hice con otros…

Hoy me ilusionaré contigo…
Mañana te entregaré toda mi confianza…
Pasado me romperás el corazón…
Y al siguiente me veré intentando olvidarte…
Como ya hice contigo. Como hice con otros…
Las cicatrices te marcan el camino para huir de lo que te hizo daño…
De lugares y personas a los que no tienes que volver…
Pero también te recuerdan lo aprendido…
Como las cicatrices que acumulo en las piernas, de aprender a patinar o montar en bici…
Solo hay que saber contar la historia sin que te remueva, sacando el lado positivo a la experiencia que te marcó…
Mi promesa fue no llamarte. Y no lo hice…
Mi promesa fue no escribirte. Y no lo hice…
Mi promesa fue no buscarte. Y no lo hice…
Mi promesa fue no pensarte…y no pude cumplirlo…
Fue imposible sacarte de mi mente…
Ahí fuera llueve…
Nunca me han gustado los días de lluvia…
Pero desde que estás aquí, no me importa que llueva o truene…
Porque es la excusa perfecta para acurrucarme contigo en el sofá; leer mientras me apoyo en tu regazo; tomar chocolate caliente; ver una película; hacer una maratón de series…
Cometí el error de buscarte en otros...
Y siempre faltaba algo…tu sonrisa, tu forma de hablar, tus gestos, tu manera de andar, tu incontinencia verbal, tus ocurrencias, tu forma de ser…
Siempre había algo que me hacía arrepentirme de haber llamado a otras puertas, hasta que comprendí que no habría nadie como tú si no eras TÚ…
Ya lo siento por ti…
Porque no puedes avanzar sin mí, y quizás conmigo tampoco…
Estás atrapado en mi embrujo y no pienso deshacerte de ese hechizo…
Por eso vas a tener que acostumbrarte a mí…
Me asomo a tu mirada, porque ahí veo mi reflejo…
Me veo decidida, guapa, extrovertida, divertida, con ganas de comerme el mundo…
Y he de decirte que me gusta lo que veo. Así que gracias por devolverme un reflejo que nunca imaginé…
Estoy bien. Aunque algunos no lo crean y a ti te sea indiferente…
Tengo una cicatriz más, que duele y se intensifica cuando me acuerdo de ti…
Tengo sensación de rabia cuando veo tus fotos y sé que tu vida continúa…
Tengo menos capacidad para creer a los demás, porque creía que tú eras diferente. Y lo peor es que lo sabías y jugaste con esa carta a tu favor…
Tengo el alma rota y no la podré reconstruir. Será difícil…
Tengo menos confianza en mí y en creer gustarle a nadie…
Tengo menos sensación de ser alguien para otro alguien…
Pero así con todo, estoy bien. Aunque no lo creía ni yo…
¿Sabes qué?
Que pudo rendirse en los brazos de algún que otro adulador…
Podría haber sido, por unas horas, feliz en cualquier abrazo desconocido…
Pero, en cambio, quiso quedarse contigo, aunque no sabía muy bien a qué atenerse, porque no eras lo suficientemente claro ni valiente con ella…
No creo en mí y por eso no creo en los demás…
O no creo en los demás y por eso no confío en mí y mis posibilidades…
Un galimatías difícil de desenmarañar y complicado de entender…
Así, soy yo…