No hubo espacio para más. Solo piel con piel.
Debajo de la ducha, su piel morena se acopló a la suya, algo menos tostada por el sol…
Ambos se redujeron a piel, piernas y brazos. Deseo y besos. Ganas. Lujuria…
Besos cálidos, que provocaron que el agua debiera correr algo más fría de lo normal. Para calmar la sed de ambos…
