Le tuvo solo para ella. Sin tiempo, sin prisa, sin tener que estar mirando el reloj
Solo para ella, para relajarse charlando con una copa de vino en la mano. En el sofá
Y ahí empezar un inocente juego, movidos ambos por el vino y la necesidad del otro, que les llevó a un lugar más cómodo
A la cama a descubrirse, a disfrutar el uno del otro, a hacer todo lo que se les antojara
Parar y continuar. Despertarle de ese ligero sueño que te invade cuando haces el amor, y continuar…
Jugar a asaltarlo por detrás, por la espalda, de manera inocente y de forma traicionera, para llenarlo de besos y terminar disfrutando cara a cara…
Cara a cara para abrir bien los ojos y no perderse un detalle. Para jugar a recorrerlo con sus besos, para dejar su marca en su cuello…
Y continuar…
