Tú y yo, sin romanticismo.
Solo comprendiéndonos.
Porque esto no es como tener quince años, cuando la vida solo consistía en tener que preocuparse por disfrutar.
Tú con tu vida, tus complicaciones, tus historias, tus dudas…yo con todo lo mío, igual que tú, a las espaldas.
Pero simplemente tú y yo…
