No te pido tus noches y tus días, ni toda tu atención…
Te pido justo lo que me merezca, y poder disfrutar de ti, de tu compañía, de tu cálido abrazo, de tu tiempo…
Te pido alegrar mis mañanas con tus ‘buenos días‘ y mis noches con un ‘hasta mañana‘…
Te pido un poco a poco, un me gustas y ya vemos, te pido improvisar y ver cómo salen las cosas…
Pero solo si estás seguro de que quien te lo pide, yo, soy quien quieres que te lo pida…
