Me gusta mirarte cuando andas distraído…
Observarte en silencio y disfrutar con cada detalle…
Hasta que me pillas mirándote y aflora un sonrisa a tu boca, mientras yo, aún hoy, me sonrojo cuando nuestras miradas se encuentran…
Y disfruto cuando, sin que medie palabra, me acercas a ti y nos fundimos en un beso…
Porque sí…
