Quiero seguir viendo esos ojos verdes, perderme en ellos y que me engullan. Quiero que tu tímida mirada se ancle en mí y no tenga sentido que te vayas. Quiero verte.
Quiero que esa sensación de reconocerme en esas pupilas y en esos ojos curiosos no se termine nunca. Y tener la confirmación, todos los días, de que me miran solo a mí.
Quiero que me busques eternamente con esos luceros, porque entonces tengo claro que nunca me perderé, por complicado que sea el camino. No sé que ha sido de mí todos estos años sin ti, sin esos ojos, sin esos faros preciosos y esos ojos bonitos.
Esa fue la nota que recibió…
