Me ayudaste a reconstruirme…
No porque no supiera o no pudiera, sino porque me hiciste ver que era necesario…
Me ayudaste a encontrar cada trozo que faltaba…
A unir los jirones de piel que fui perdiendo en el camino…
A recordar quién era y quién quería ser…
Con mimo, cariño, respeto y dándome espacio…









